Correr y gimnasio, te damos las claves de como combinarlo

Cuando hablamos de actividades que se compaginan a la perfección, el running y el entrenamiento son unas de ellas. Los corredores están en una búsqueda constante de ejercicios para mejorar la resistencia y la fuerza, que les pueda ayudar a tener un mejor rendimiento en las carreras. Es por eso que, a continuación, te decimos lo más importante de la relación que hay entre correr y gimnasio.

Running y training, la combinación perfecta

Correr y entrenar en el gimnasio son actividades compatibles

El running es una actividad en la que se necesita un buen desarrollo muscular. El tren inferior es el que influye de manera más directa en esto, pues son los glúteos y las piernas los que están más implicados en el running. Sin embargo, de manera indirecta, también los músculos del tren superior adquieren un papel importante al correr.

Es por eso que muchos corredores buscan complementar sus entrenamientos de running con entrenamientos en el gimnasio. Al trabajar en la fuerza y la resistencia de los músculos, el rendimiento de la carrera también se verá afectado de manera positiva, permitiendo un mayor aguante, más agilidad, velocidad y una menor probabilidad de lesionarse. Es por eso que podemos decir que el entrenamiento en el gimnasio y el running son dos actividades que se complementan de manera perfecta.

Ventajas de combinar el running con el gimnasio

Como hemos mencionado, el hecho de combinar estas dos actividades no traerá más que beneficios para el cuerpo y para el rendimiento. Estas son algunas de las ventajas principales de combinar correr y gimnasio.

• Aumento en la resistencia de todos los músculos del cuerpo para poder aguantar la intensidad de una carrera.
• Se fortalecen los músculos.
• Reduce la probabilidad de padecer lesiones.
• Los músculos de las piernas adquieren una mayor fuerza y resistencia.
• Se mejora la estabilidad y el equilibrio.
• Se mejora la capacidad de mantener un ritmo de carrera, debido a la fuerza muscular.

Contar con un par de zapatillas para cada disciplina

Si ya te decidiste a combinar los entrenamientos de running con los de gimnasio, es importante que cuentes con el equipo adecuado para ello. En el mercado, se pueden encontrar zapatillas de correr, que son específicas para esta práctica. Este tipo de zapatillas se especializan en la amortiguación, ya que correr es una actividad de alto impacto y se necesita una buena absorbencia de pisada. Por su parte, las zapatillas entrenamiento fueron creadas para llevar al gimnasio, realizar ejercicios funcionales, de fuerza y de resistencia, así como de ejercicios de intervalos de intensidad. Este tipo de calzado se especializa en la estabilidad y el soporte.

Realizar un deporte sin contar con las zapatillas adecuadas puede ser un gran riesgo para la salud, pues la probabilidad de lesiones es más alta. Sin embargo, también existen zapatillas híbridas, que pueden servir para el gimnasio o para el running. Aunque, si eres un corredor experimentado, recomendamos tener un calzado que sea específico para esa disciplina.

Los mejores ejercicios de gimnasio para corredores

La mayoría de los corredores se enfocan en los entrenamientos de tren inferior en el gimnasio, para mejorar la fuerza y la resistencia de las piernas. Si también tienes ese mismo objetivo, algunos de los mejores ejercicios son los de peso muerto, sentadillas, y el curl de pierna con máquina.

Todo lo anterior se puede complementar con otros ejercicios que involucren otras partes del cuerpo, para fortalecer la fuerza muscular en general. Se pueden realizar ejercicios de abdomen con o sin peso, así como ejercicios para el fortalecimiento de la espalda como las dominadas, el remo y los jalones hacia atrás.

Entrenar a los músculos de los brazos nunca estará de sobra. También sería recomendable realizar ejercicios para el bíceps, el tríceps y el pecho. Tener fuerza en todos los músculos del cuerpo, se reflejará al momento de correr.

Esto es solo una pequeña descripción de los ejercicios que suelen ser realizados por los corredores. Pero, para ponerlos en práctica, es aconsejable que lo hagas en compañía de un entrenador en el gimnasio, para elaborar una rutina específica para tu tipo de cuerpo y objetivos, y también para evitar lesiones en el proceso.