Eliud Kipchoge volverá a intentar bajar de las dos horas en una maratón
Uno de los mejores corredores de maratón del mundo, el keniano Eliud Kipchoge, va a volver a intentar este año bajar el tiempo mínimo de una maratón. En este reto va a intentar dejar la marca por debajo de las dos horas. En el año 2017 ya intentó este reto en Monza (Italia), pero la marca quedó tan solo 26 segundos por encima, no llegando a bajar de las dos horas establecidas para batir el record. En aquella ocasión aguantó 30 kilómetros a un ritmo de 2,50 minutos por kilómetro. Por otro lado, en el año 2018 batió el record mundial en Berlín al correr el maratón más rápido de la historia.
Este año volverá a intentar bajar la marca en el desafío INEOS 1:59, que se realizará el próximo 12 de octubre en Viena. Aunque ya se ha confirmado que esta prueba no contará como record mundial, ya que no será reconocido por la Asociación Internacional de Federaciones de Atletismo (IAAF) al no cumplir con la normativa establecida por ellos. Pero si lo consigue, Eliud Kipchoge se convertirá en el mejor y más rápido corredor de maratón el mundo.
Un grupo de científicos y profesionales, entre los que se encuentran ingenieros, biomecánicos y analistas de datos, que trabajan en el Nike Sports Research Lab investigan cómo explotar al máximo el talento de los mejores atletas del mundo.
Eliud Kipchoge, un súper hombre que busca batir un súper record
Kipchoge estará acompañado por un grupo de 30 corredores que formarán su equipo de ritmo. Uno de ellos será el cinco veces olímpico Bernard Lagat. El estadounidense estableció un tiempo record de maratón en 2:12:10. También le acompañarán los hermanos noruegos Henrik, Filip y Jakob Ingebrigtsen, ganadores de campeonatos europeos y mundiales. Estos atletas entre otros, se irán turnando cada 4,8 kilómetros para ir al lado de Kipchoge. Las zapatillas de running Nike que se baraja que el maratoniano use en esta importante ocasión son las ya conocidas Nike ZoomX Vaporfly.
Otros de los nombres que han sonado como posibles liebres para el keniano han sido sus compatriotas Geoffrey Kamworor y Augustine Kiprono, el estadounidense Paul Chelimo, el ugandés Joshua Cheptegei y el suizo Julien Wanders.
Para prepararse, Kipchoge realiza una preparación especial donde corre cada semana entre 200 y 230 kilómetros, en un campo de entrenamiento en Kenia, su país natal. Junto a él corren un grupo de atletas de élite kenianos. A sus 34 años ha sido medallista olímpico hasta en tres ocasiones y ya se está preparando también para los juegos Olímpico de Tokio 2020. Si lograra el objetivo, podría llegar a los JJOO en las mejores condiciones para hacerse con otra medalla olímpica.
Dónde tendrá lugar el desafío INEO 1:59
El lugar elegido para este reto ha sido Viena, a pesar de no contar como maratón oficial, debido a sus condiciones. Este recorrido es un tramo plano de pavimento arbolado, por lo que el atleta cree que gracia a esto le resultará más fácil correr a mayor velocidad. Además, Kipchoge ya ha anunciado que no realizará el recorrido previamente para conocer el terreno, y que seguirá entrenando en su país de origen hasta el día de la carrera. Otras de las ventajas por las que ha sido escogido este lugar en concreto ha sido su clima, ya que suele ser templado y soleado durante la fecha establecida, con una temperatura que rozará los 16 grados.
El circuito tiene un recorrido de 9,6 kilómetros que se recorrerá a ida y vuelta, para lo que tendrá que completar 4,3 veces. El lugar escogido para ello es la avenida Hauptalle, cercana al estadio Ernst Happel. La organización ha anunciado que podrá haber gente animando en las calles, ya que la anchura de las calles y la ausencia de tráfico lo permiten.
El corredor ha reconocido a algunos medios de comunicación que lo más importante es la preparación mental, y que para esta ocasión está mucho más preparado que en la maratón de Monza.
El reto INEOS 1:59 se basa en otros grandes logros de la humanidad dentro del mundo del atletismo. Algunas de las referencias que en las que se han basado los organizadores es el momento en el que Roger Bannistes rompía la barrera de los cuatro minutos en la milla o en diez de Nadia Comaneci en Montreal en 1976 y otros como la conquista del Everest por Edmundo Hillary y Tenzing Norgay en 1953.
El pasado mes de abril, en la maratón de Londres, volvió a dejar cifras inalcanzables. En esta ocasión el tiempo se quedó en poco más de dos horas y dos minutos, casi un minuto más que en la maratón de Berlín.
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